Construye

Lula Da Silva propone CONVERTIR EDIFICIOS del Estado ABANDONADOS en VIVIENDAS populares

La propuesta del preside de Brasil se dio durante su participación en una ceremonia en la que sancionó un nuevo programa de vivienda popular "Mi casa, mi vida", creado en 2009

Lula propuso el pasado jueves transformar los edificios y terrenos abandonados que son propiedad del Estado de Brasil en viviendas sociales para la población más vulnerable. EFE/ André Borges

El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, propuso el día de ayer transformar los "miles" de edificios y terrenos abandonados que son propiedad del Estado brasileño en viviendas sociales para la población más vulnerable.

"El Estado debe sentirse obligado a hacer una reparación para que las personas tengan acceso a una casa", afirmó el mandatario progresista en una ceremonia en el Palacio de Planalto, en Brasilia.

Lula también sancionó, acompañado de varios de sus ministros, una medida aprobada por el Congreso que mejora las condiciones del programa de vivienda popular "Mi casa, mi vida", el cual fue creado en 2009, durante el segundo mandato de Lula, y recuperado este año bajo moldes parecidos.

La ampliación de este programa, el cual consiste en que el Gobierno subsidia una parte importante de la vivienda a los más pobres, se traduce en la disminución de los intereses del préstamo para las familias de bajos ingresos que se inscriban al mismo y en un mayor acceso para la clase media.

La meta del Gobierno es subsidiar "más de dos millones de viviendas" hasta 2026, el último año del mandato de Lula, el cual comenzó el pasado 1 de enero.

Sin embargo, Lula también recordó en su discurso que aún hay un elevado déficit de vivienda en el país, que calculó entre seis y siete millones, y por esta razón propuso distribuir entre la población los ediciones y terrenos hoy abandonados por el Estado brasileño.

"Vamos a tener que transformarlos en unidades habitacionales", señaló.

Lula citó que solamente el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) cuenta con "3 mil" locales, entre casas, terrenos y edificios, muchos de ellos en el centro de las grandes ciudades del país, a los que no se les está dando ningún uso.

"¿Por qué están en las manos del INSS y no se distribuyen entre el pueblo?", cuestionó.

En este sentido, Lula, de 77 años, prometió que cuando termine su mandato entregará un país "sano", "económicamente fuerte y políticamente respetado" en el que la Constitución es "cumplida".

Con información de EFE.

Más Noticias